Qué es la vaginitis y por qué es tan frecuente

La vaginitis: qué es y por qué es tan frecuente

La vaginitis es el nombre que se le da a cualquier inflamación o infección de la vagina. Es un problema ginecológico común que afecta a mujeres de todas las edades. Se estima que el 90% de las mujeres padece algún tipo de vaginitis a lo largo de su vida.

Síntomas de la vaginitis


Es importante saber que la vaginitis puede ser asintomática o dar algún tipo de síntoma que por ser poco molestos, nos pasen desapercibidos. Puede estar causada por un organismo infeccioso como chlamydia, también por parásitos como podría ser por tricomonas, hongos en el caso de cándida o por algún tipo de virus como el Virus del Papiloma Humano (HPV). Los síntomas más frecuentes en la vaginitis son

  • Irritación o picazón del área genital,
  • inflamación,
  • flujo vaginal anormal,
  • olor vaginal penetrante,
  • ardor al orinar, así como
  • dolor y/o irritación durante la relación sexual

Diagnóstico de la vaginitis

El diagnóstico de la infección suele ser rápido y sencillo. Además de referir los síntomas asociados a la infección, para obtener el diagnóstico se realiza una exploración ginecológica y una citología. Otra técnica que se utiliza frecuentemente es el cultivo de dicha muestra.

  • Citología de Papanicolaou

Esta prueba recoge células de varias partes del cuello del útero de la paciente para estudiarlas al microscopio. Más que una técnica diagnóstica, la citología cervical es una técnica de diagnóstico precoz para detectar una infección causada por el Virus del papiloma humano (VPH).

  • Cultivo de la secreción vaginal

Se realiza en distintos medios para descubrir qué microorganismo es el causante de la infección.


Tratamiento de la vaginitis


El tratamiento también suele ser sencillo. En muchos casos podrá realizarse con óvulos o comprimidos de uso tópico o con fármacos vía oral. En algunos casos de vaginitis está indicado el tratamiento también a la pareja sexual de la paciente.


Prevención de la vaginitis


La prevención de la vaginitis comienza con una buena higiene: secándose completamente después del baño, llevando ropa interior de algodón y ropas que no sean ajustadas o limpiarse correctamente con el papel higiénico. Las duchas vaginales no están recomendadas pues predisponen a la vaginitis, al alterar el balance normal del PH del medio vaginal. Los desodorantes íntimos y los productos perfumados (papel higiénico, jabones…) pueden causar alergia, por lo que es mejor no utilizarlos. El consumo de probióticos puede reducir la probabilidad de desarrollar vaginitis debido a los antibióticos.


Si mantiene relaciones sexuales catalogadas como de riesgo, es decir, con personas que tengan algún tipo de infección que se transmita por vía sexual o bien con personas que desconoce si están o no infectadas, hay que utilizar mecanismos de protección desde el primer momento del contacto sexual como el preservativo, cuya seguridad, si se usa adecuadamente, es muy elevada.


Por último, es necesario recordar la importancia de la realización de las revisiones ginecológicas correspondientes así como consultar al ginecólogo cuando se observen cambios en el flujo, si se presentan sangrados fuera de la menstruación o si se aprecia irritación, sequedad, picores, o cualquier signo inusual. Para ello en Accuna ponemos a tu disposición todo nuestro equipo médico que supervisará tu salud ginecológica y te dará las indicaciones adecuadas. Pide cita y consúltanos.


Para conocer los próximos temas de nuestro blogsíguenos en facebook o twitter.



He leído, entendido y acepto el Aviso legal y la Política de privacidad.